Así lució –majestuosa- la Catedral de Morelia durante el espectáculo de luz y sonido que -a pesar de la lluvia- se ofreció a los más de dos mil maestros del Sistema UNO.
Blancos y luminosos amarillos dieron vida a los sobrerelieves barrocos de la colonial iglesia. Al ritmo de los sones de Morelia, los maestros presenciaron, embelesados el espectáculo que distingue a la capital michoacana.
El show tuvo una duración de 15 minutos, preámbulo espléndido para iniciar camino a la cena preparada en la que -alejads de las iPads y los libors, podrán disfrutar de un ambiente relajado antes de regresar el jueves a su tercera y última capacitación en este congreso.
Este jueves, termina la capacitación con la entrega de diplomas, la sesión plenaria de Rosa Barocio y el cierre del evento, antes de que todos los maestros regresen a sus ciudades de origen.