A tres años de la implementación del sistema, UNO Internacional quiso compartir con su comunidad de colegios algunos de los resultados de las evaluaciones aplicadas en alianza con Lexium; los cuales, aunque ya son del conocimiento de cada institución educativa a nivel individual, adquieren otra dimensión cuando se comparan de manera global.
Para conocer más sobre el rumbo que estos indicadores revelan, UnoNews conversó con Araceli Pastrana, gerente de evaluación de UNOi, quien explicó que al inicio de cada ciclo escolar, hacia el mes de septiembre, los niños son evaluados en habilidades intelectuales, emocionales, de lectura y preferencias de aprendizaje. “Hay dos rubros –dijo Araceli–, que nos interesan particularmente: las habilidades intelectuales y las habilidades emocionales, debido a que son la raíz de donde proceden todos los procesos cognitivos”.
Una primera comparación consistió en tomar los resultados a nivel nacional del primer año de aplicación del sistema para la primera generación en 1º de primaria; los del segundo año para la misma generación –cursando entonces 2º grado–, y los resultados del tercer año para 3º de primaria. Así, explicó Araceli, luego de tres años de evaluaciones, esta generación muestra un desarrollo sostenido, con un crecimiento constante, que habla de un incremento de 9 puntos absolutos, pero en porcentaje representa un crecimiento del 19% en el desarrollo de sus habilidades intelectuales.
Las habilidades intelectuales que mide esta prueba, precisó, son habilidades básicas que tienen que ver con clasificación, atención, orientación, analogías, lenguaje, vocabulario matemático, planeación. Habilidades digamos esenciales que son las que nos permiten desarrollar todo lo demás. “Esto –agregó–, se potencia con la forma de trabajo del sistema de UNOi donde estamos actualmente identificando la relación entre las habilidades emocionales y las intelectuales; porque se ha comprobado que puedes tener un buen desarrollo intelectual, pero si no tienes un buen desarrollo emocional es difícil que lo ejerzas en la vida real”.
Se cuenta con un seguimiento como este para cada colegio, que además se compara con los promedios nacionales. Como es de suponer, algunos colegios superan este nivel de desarrollo, en tanto que otros se ubican por debajo de la media, lo que en ambos casos obedece, en alguna medida, al grado de implementación del sistema y su tratamiento en cada institución.
También en el rubro de habilidades intelectuales, al comparar el promedio de los resultados de todos los grados de nivel primaria, en los tres años de aplicación de las evaluaciones, se observa un avance de 7.5% con un crecimiento sostenido que nos dicen que estamos en el camino correcto.
En el nivel de secundaria, los chicos que la iniciaron el año pasado mejoraron un 16% en sus habilidades intelectuales en la evaluación de este año. Araceli aclaró que los resultados con los niños más grandes son más contundentes, porque es más fácil que entiendan de qué se trata el trabajo para lograr lo que se requiere.
Por lo que toca a las habilidades emocionales (abarcan: autoestima, manejo de la tensión, bienestar físico, propensión al cambio, asertividad, conciencia de los demás y empatía), los promedios nacionales en primaria alta para los tres años de aplicación muestran una tendencia de crecimiento mucho más marcada. El promedio nacional pasa de 50 a 60, lo cual representa un 20% de incremento que es sostenido y contundente.
En el caso de la secundaria, donde las emociones van adquiriendo los matices de la adolescencia, los promedios nacionales de 1º a 2º año también tienen una mejora de 5 puntos absolutos –54 contra 59–, que representan un crecimiento del 10%.
Los colegios tienen los resultados de estas evaluaciones desde el nivel de alumno y habilidad, grupo, grado o institución, lo que les ofrece una enorme variedad de posibilidades de análisis. Por ejemplo, citó Araceli, ver la relación entre la seguridad y la autoestima que tienen los niños con sus resultados académicos. Vamos a ir encontrando cosas interesantes, aseguró.
Las evaluaciones de Lexium se aplican en septiembre y los resultados se entregan en octubre. El coach presenta los resultados a los directivos y a partir de ahí definen un plan de acción; se hace una planeación estratégica para que la escuela se centre en alguno de los aspectos que requieren mayor atención y también para que identifiquen en dónde están sus fortalezas.
Para el próximo ciclo escolar –nos adelantó Araceli– las pruebas van a llegar junto con los libros de primer bimestre, de manera que los maestros van a poder decidir la fecha de aplicación entre el inicio de clases y hasta el 30 de septiembre.
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Evaluación académica más allá de solo conocimientos
Otra de las innovaciones que pondrá en marcha UNO Internacional en el próximo ciclo escolar tiene que ver con la evaluación académica que se realiza cada bimestre y que, según explicó para UnoNews, Ángela Ortiz, hasta ahora consistía en aplicar un examen de conocimientos.
La directora editorial de UNOi dijo que muchas veces confundimos evaluar con poner una calificación y qué en el modelo educativo por competencias que proponen, ahora además de conocimientos se van a medir actitudes y habilidades. Para ello, el maestro dispondrá de información que le permita saber qué reactivo está midiendo qué tipo de aprendizaje en cada uno de estos tres aspectos.
Además, al inicio de cada bimestre el alumno dispondrá de una rúbrica que le servirá de guía para qué sepa lo que de él se espera y pueda ir regulando su propio proceso de aprendizaje.
En primaria, anunció Ángela, se reduce a 20 el número de reactivos por evaluación y se entregan impresos en hojas sueltas que el estudiante responde al final de cada bimestre. Adicionalmente, a manera de autoevaluación, el alumno llena la rúbrica identificando en dónde va bien o no tanto.
La idea, señaló, es forjar alumnos que se conozcan, con un proceso cognitivo rico en el cual puedan incidir ellos mismos. También la intención es ir llevando poco a poco el proceso de evaluación más hacia la línea del manejo de rúbricas que de reactivos.
¿Cómo va a saber el maestro qué está midiendo? Dispondrá en la plataforma de una herramienta digital que le dirá a qué nivel de aprendizaje y componente corresponde cada reactivo.
Se prevé que más o menos hacia la mitad del ciclo, los maestros cuenten con un banco de reactivos que podrán seleccionar para diseñar sus propias pruebas, de acuerdo a las características de sus grupos y los aprendizajes esperados.
Finalmente, Ángela comentó que estos cambios se aplicarán en las evaluaciones tanto del programa SE en español, como del programa BE, en inglés.
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