Sin duda en nuestra lengua, como en muchas otras, la palabra problema tiene una fuerte carga de connotación negativa. Si buscamos sinónimos mediante la utilidad de Word, aparecen palabras como: dificultad, inconveniente, contrariedad, complicación, molestia, traba y hasta embarazo –suponemos que está última, en su acepción de obstáculo y no precisamente de gestación.
En su columna de esta semana en pijamasurf.com, Pablo Doberti distingue entre problema e inconveniente, confiriendo al primero efectivas posibilidades pedagógicas, en tanto que al segundo simplemente hay que superarlo. “De los problemas –afirma- hay que valerse, ponerlos a trabajar”.
El artículo puede leerse en: http://pijamasurf.com/2013/09/el-inversor-el-buen-problema/