Apoyados por 450 maestros que donan su tiempo posterior a las clases, en Tlaxcala existen alrededor de 70 clubes de ciencias en los que participan 6, 500 alumnos de secundaria y preparatoria. Algunos de ellos, vivieron ya la experiencia de viajar a la NASA.
En la última emisión por W-Radio de Educación XXI, Leonardo Kourchenko recibió en cabina a Marcos Núñez George, Maestro en Ciencias y líder del Club de Ciencias de Tlaxcala, así como a los alumnos Berenice Sánchez y Yancarlo Bello Bello, ambos estudiantes de bachillerato, en CBTIS y CONALEP, respectivamente.
Berenice Sánchez en Educación XXI
Sobre la forma en que se involucraron en los clubes de ciencias, Berenice refirió que estando en secundaria respondió a una convocatoria para construir un telescopio en la BUAP. Durante tres viernes trabajaron por la mañana en construir el telescopio; por la tarde, científicos les ofrecieron conferencias sobre su manejo y temas de astronomía y, al caer la noche ponían en práctica. El telescopio construido quedó en su escuela donde el club realiza ‘Noches de estrellas’.
Por su parte, Yancarlo dijo que fue como espectador a una de estas noches y a partir de ahí comenzó a interesarse. De su experiencia en la NASA dijo que resultó magnífica. Ahí trabajó con estudiantes de la India en el taller de diseño de un hábitat para Marte, donde aplicó conceptos adquiridos del profesor Núñez.
Marcos Núñez George en Educación XXI
A petición de Leonardo respecto a sus antecedentes, el maestro Marcos Núñez dijo ser matemático egresado de ENEP Acatlán, para luego orientarse en áreas de robótica, cómputo, redes y telecomunicaciones, estudiando por cuenta propia en Estados Unidos. Por su perfil, la SEP en Tlaxcala le invitó a trabajar en escuelas secundarias en el área de matemáticas, donde fundó un club para apoyar la materia después de clases. Para el 2012, los clubes se habían multiplicado abarcando actividades científicas como astronomía, robótica, fuentes de agua y más.
El proyecto llamó la atención de la NASA y les invitaron a exponerlo ante los 150 mejores docentes de ciencia de Estados Unidos. A cambio, brindaron capacitación a 23 docentes, que comenzaron a trabajar con materiales de primer mundo, de alta tecnología. Hoy, cerca de 70 clubes en Tlaxcala agrupan a 6,500 alumnos y 450 maestros de distintas áreas dirigen las sesiones fuera del horario regular.
Sobre el funcionamiento de los clubes, el Nuñez dijo que hay cuatro maestros, uno diferente por día, que imparten temas lo mismo de ciencias que de humanidades, procurando una educación integral. Los niños deciden el tema que les interesa desarrollar, ya sea robótica, nebulosas, hoyos negros, ciencia, cohetes, aplicaciones, etc. Los chicos pueden participar desde primero de secundaria hasta concluir la prepa.
Berenice, que también fue a la NASA, cursa el tercer semestre de bachillerato y tiene cinco años participando en el club. Se declara apasionada de la astronomía, carrera que piensa seguir en la rama de astrofísica.
Yancarlo Bello en Educación XXI
Yancarlo dijo estar enfocado más en la robótica y demostró en cabina un prototipo de vehículo robot, el cual accionó para avanzar y girar mediante comandos transmitidos por bluetooth desde su teléfono celular. Sobre sus planes a futuro, Yancarlo señaló que piensa estudiar mecatrónica o robótica.
El maestro Nuñez destacó la creatividad de sus alumnos para alcanzar resultados con recursos limitados. Uno de ellos, Javier Rivera Monter, obtuvo el 1er lugar en robótica espacial para la colonización de Marte. Otro caso que mencionó, fue un segundo sitio logrado por alumnos de secundaria en un concurso de robótica donde el resto de los participantes eran universitarios.
Interrogados sobre las ‘Noches de estrellas’, los invitados dijeron que las realizan en planteles, plazas y parques, incluso en pequeñas comunidades. Llevan planetarios móviles, telescopios, ofrecen conferencias y realizan otras actividades lúdicas antes de observar el firmamento. Los alumnos de los clubes explican a los asistentes lo que están viendo y el funcionamiento del telescopio. Los padres apoyan con la decoración de las aulas para las presentaciones y aportan materiales reciclables. El evento es abierto a todo público y, en promedio, asisten de 3 a 4 mil personas.
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El audio del programa completo puede escucharse aquí.