El programa de este domingo de Educación XXI, emitido por W-Radio bajo la conducción de Leonardo Kourchenko y con los comentarios de Pedro Landaverde, conto esta semana con la presencia de la Dra. Alicia Olavarría Spínola de Tomassi, psicóloga, paidopsiquiatra, socióloga, especialista en terapia familiar y además Directora del colegio Círculo Mexicano de Integración Educativa, CEMIE.
Para entrar en materia, la Dra. Olavarría sostuvo que los valores son universales y han estado presentes en toda la historia de la humanidad. Están ahí y todos tienen la libertad para adoptarlos y ejercerlos.
A lo anterior, Leonardo agregó que no son patrimonio de ninguna creencia y Pedro Landaverde puntualizó que tienen la característica de ser imprescriptibles, inalienables e intransferibles.
La enseñanza de los valores se dijo, no puede ser teórica sino vivencial y congruente; por ejemplo, no permitiendo que un niño lleve a la escuela una película pirata.
Pedro hizo énfasis en que los valores inician en la casa. Los padres, dijo, son los primeros responsables de su transmisión; la escuela es complementaria.
Al cuestionamiento de Leonardo de qué hacer cuando la formación en casa es nula o hay ausencia de valores Alicia Olavarría dijo que se puede lograr infundir valores cuando los chicos encuentran alguien que los escucha y que entiende sus circunstancias.
Se reprochó en la mesa la actitud de algunos padres que prefieren dar a sus hijos cualquier cantidad de cosas materiales en vez de escucharlos y luego se quejan de que no aprecian lo que tienen. La Dra. Olavarría insistió en la necesidad de estar atentos a las señales que nos dan hijos y alumnos
Para ejemplificar el valor de la bondad como inherente a todo ser humano, Leonardo se refirió a una película en la que un acaudalado tetrapléjico contrata un asistente africano y, tras el inevitable choque cultural, surgen formas de comunicación y una sólida amistad.
Para que los chicos conozcan otras circunstancias, la Dra. Olavarría recomendó que las escuelas tengan servicios sociales mediante los cuales los alumnos puedan valorar su propia vida y la de otros. A los directores les pidió que observen a sus alumnos, que estén con ellos. Lo más importante –señaló– es la cercanía, la posibilidad de entender dónde está la otra persona y tener empatía con ella. Tratarlos como personas y no como matrícula, concluyó.
A los padres, Pedro Landaverde recomendó dedicar más tiempo a acompañar a los hijos y no saturarlos de bienes materiales. En la medida que alguien se apodera de un valor –dijo– lo convierte en una virtud.
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El audio completo del programa se puede escuchar en: http://www.wradio.com.mx/escucha/programas/educacion-xxi/programa/1573411.aspx?nprm=iDZ8W4eKn9aH3R%2flDUvxhf2EPujUwG2EVPVZ8hBFoexBpNvqycmxOyQSKA7TlVB5