Esta fue una de tantas frases con las que Elaine Gallagher levantó una carretada de aplausos en la sesión plenaria de esta mañana en el Congreso Transforma XXUNO Be One, en la Universidad de las Américas Puebla, donde expuso su plática: ‘Clases exitosas en el siglo XXI’.
La directora de Relaciones Internacionales de UNOi, comenzó por pedir a los maestros que no tuvieran miedo, ya que “los cambios suceden poco a poco” y mencionó aquellos que a su juicio significan al siglo XXI: tecnología, producción oral en dos idiomas, liderazgo, colaboración y pensamiento crítico.
Con una experiencia de más de 45 años en la enseñanza, Elaine dijo que la mayoría de los presentes no había nacido todavía cuando ella empezó a dar clases en 1964. Narró una experiencia que tuvo en 1992 cuando su directora le pidió que enseñara Ciencias Naturales usando una computadora cuando ella no sabía no lo uno ni lo otro, su materia era da de Ciencias Sociales. Cuando finalmente Elaine aceptó, pidió que le mostrara el libro, pero no había tal, se trataba del programa de computadora Science 2000 que operaba con discos. Su directora le dijo: ¡Tú puedes! y le apoyó para aprender el programa. A las tres semanas Elaine dictaba clase en un aula con 14 computadoras más la suya.
Dominar el programa le llevó tres meses, pero dijo que aprendió mucho más que en toda su formación académica. A sugerencia de Elaine, UNOi adquirió recientemente una versión actualizada de Science 2000.
Con el beneplácito y el aplauso de los maestros, Elaine pidió a los directores que les brindaran su apoyo y que no perdieran tiempo en revisar los planes de cada uno de ellos. Manifestó también su rechazo, por cuestiones de madurez, a iniciar la lectura antes de los cinco años: “No hay prisa”, dijo.
Relató también que estuvo en Finlandia donde la preocupación no son las calificaciones sino el crecimiento moral y fisco de los niños y el compartir con ellos y destacó que la diferencia no está en la calidad de los maestros. “Un buen maestro –dijo– enseña sin nada… no hacen falta libros ni iPads”.
Elaine puntualizó algunas características de la educación del siglo XX, donde el maestro estaba en el centro, a diferencia de lo que debe ocurrir en el siglo XXI, donde es el alumno el que debe ser el protagonista.
Al término de su presentación, dos mil quinientas personas ovacionaron de pie a Elaine Gallagher. El aplauso más nutrido y prolongado que recibió ponente alguno durante el Congreso.